Pasea por el casco histórico, el barrio de Vegueta, en Las Palmas de Gran Canaria, la capital de la isla. Allí te espera la catedral de Santa Ana, con su mezcla de estilos gótico, renacentista y neoclásico y sus imponentes torres gemelas. En su interior te aguarda el Museo Diocesano de Arte Sacro, donde se exhiben valiosos objetos artísticos, pinturas y una importante colección de esculturas españolas.
Tenerife rebosa cultura. Aquí encontrarás joyas arquitectónicas como San Cristóbal de la Laguna, ciudad Patrimonio de la Humanidad y antigua capital de Tenerife, que alberga un modélico trazado colonial. Te enamorarán sus calles peatonales y sus edificios religiosos (imprescindible la catedral). En tu recorrido también surgirán a cada paso palacetes y casonas señoriales, con fachadas de colores intensos y pórticos de piedra.
Si deseas conocer la forma de vida tradicional de los habitantes de Lanzarote, acércate a la Casa-Museo del Campesino, también con la firma de César Manrique. Es un homenaje a la arquitectura popular que expone objetos y herramientas relacionados con la cultura y la agricultura. Profundiza en el genio del artista lanzaroteño visitando el Museo Internacional de Arte Contemporáneo (MIAC), instalado en la antigua fortaleza militar del castillo de San José.
Explora la laguna de Janubio y asciende al mirador desde el que se contemplan las salinas. En el charco de los Clicos, Reserva de la Biosfera, descubrirás un alucinante lago verde sobre un cráter volcánico.
El bello centro de Santa Cruz de La Palma te hará recordar su pasado colonial a través de palacios, casas renacentistas y arquitectura tradicional. Pasea por sus callejuelas y acerca te a la iglesia de El Salvador y el convento de Santo Domingo. Recorre la avenida Marítima, la calle O’Daly y asciende hasta el castillo de Santa Catalina.
Si buscas cultura, en Fuerteventura tienes algunas propuestas muy interesantes. Las Salinas del Carmen, por ejemplo, acogen el Museo de la Sal. Allí aprenderás su recorrido del mar a la mesa y la importancia de este elemento en la historia de las Canarias. Otro de los museos que debes apuntar es el Ecomuseo de la Alcogida, un conjunto de casas que recrean la vida tradicional de la isla.
Recorre a pie la isla y adéntrate en el parque nacional de Garajonay, bosque de vegetación prehistórica declarado Patrimonio de la Humanidad. Su selva subtropical de laurisilva, única en el mundo, concentra la mitad de la extensión arbórea de este tipo de vegetación en todo el archipiélago, en unas condiciones óptimas de conservación.
Siéntete como Jacques Cousteau en la reserva marina de La Restinga, en el pueblo más al sur de Europa, un paisaje submarino único y lleno de vida, fruto de su particular geografía volcánica.