Visita este paraíso natural de escarpados acantilados y descubre la riqueza natural de sus fondos marinos buceando entre buques hundidos, desde la ría de Arosa hasta la ría de Vigo.
Situado al norte del país, entre León, Cantabria y Asturias, éste es el parque nacional más grande de toda la península y uno de los más visitados. Aquí podrás hacer senderismo entre ríos y gargantas, ascender a una de sus cumbres más altas, el Naranjo de Bulnes, o descubrir la imponente belleza del paisaje.
Déjate sorprender por los contrastes de este espacio singular y sus hayedos, cascadas y barrancos. Haz vivac en la cima de Monte Perdido, el punto más alto del Pirineo aragonés, o asciende desde la pradera de Ordesa hasta la caída de agua Cola de Caballo y descubre un espacio natural de una belleza excepcional.
El agua es la principal seña de identidad de este hermoso paraje en el corazón del Pirineo catalán, hogar del ciervo rojo y uno de los últimos refugios en Europa del quebrantahuesos. Allí te esperan más de 200 lagos de montaña, multitud de arroyos y cascadas de aguas cristalinas.
Es una de las joyas naturales de la provincia de Cáceres, todo un santuario para la observación de aves. Acércate al Roquedo de Peña Falcón, uno de los miradores sobre el río Tajo, y contempla cómo surca el cielo el buitre negro, el ave rapaz más grande de las que habitan en España.
Atraviesa el centro de la península gracias a sus rutas de senderismo y cicloturismo, diseñadas para conocer los circos y lagunas glaciares que esconden sus 500 kilómetros de longitud.
El desbordamiento de los ríos Cigüela y Guadiana a su paso por Daimiel ha creado un humedal único en Europa. Aquí encontrarás un ecosistema privilegiado por el que cada año pasan en sus rutas migratorias multitud de aves acuáticas, absolutas protagonistas del parque.
En los Montes de Toledo encontrarás una de las mayores extensiones de bosque mediterráneo de toda la península. En las amplias llanuras de la Raña de Santiago, conocida como el “Serengueti español”, podrás admirar su abundante población de ciervos.
Situado en la costa atlántica andaluza, Doñana es el espacio natural con mayor biodiversidad de toda Europa. Conoce a pie, a caballo o en todoterreno su gran variedad de ecosistemas, los cotos mediterráneos, los paisajes áridos de las dunas móviles y la riqueza natural de las marismas.
A espaldas de la Alhambra, en Granada, se alzan las cumbres más altas de la península, el Mulhacén y el Veleta, con sus laderas jaspeadas por las nieves en varios periodos del año.
Otro paisaje dominado por los colores negros y rojizos, presidido por un enorme circo de 8 kilómetros de diámetro en la isla de La Palma. Sus pinares con ejemplares centenarios te aseguran sorprendentes rutas a pie y a caballo.
Todo son sorpresas en las islas. Adéntrate en los bosques de la isla de La Gomera y descubre un ecosistema singular. Su frondosa vegetación está marcada por la laurisilva, el único vestigio conservado de las selvas subtropicales que hace millones de años dominaban todo el área mediterránea.
Acércate a la falda del Teide, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se trata de un enorme volcán inactivo de la Isla de Tenerife, cuya cima es el pico más alto de España, y descubrirás multitud de conos volcánicos y coladas de lava.
En la isla de Lanzarote, el origen volcánico del archipiélago queda en evidencia en lugares como el mirador natural de Montaña Rajada. Desde allí podrás contemplar un paisaje en el que se funden fuego, ceniza y roca.
Súbete a un barco en Mallorca, en las Islas Baleares, y navega hasta el archipiélago de Cabrera. Si te gusta el submarinismo, te cautivarán sus ricos fondos marinos y las hermosas cuevas en las que se adentra el mar.